Calle de las Margaritas

Inmueble de 2 pisos y semisótano paramentado en el extremo noroccidental de 1 conjunto multifamiliar de 10 unidades en torno a un recorrido central; ubicado en un predio de forma rectangular con frente sobre dicho recorrido, cuyas dimensiones son: frente de 10.4 m y fondo de 8 m, para una proporción de 1 a 0.8 veces aproximadamente. La ocupación se realiza a través de un volumen de doble crujía. Tiene uso residencial, y a él se accede a través de escaleras externas que llevan a un vestíbulo tras el acceso; al norte, en la esquina, existe una sala con escaleras en 2 tramos, y al oriente, el comedor; también cuenta con acceso desde la fachada al semisótano a través de escaleras en 1 tramo debajo de la principal. La fachada consta de 2 cuerpos de 3 niveles con vanos verticales, zócalo revocado con vierteaguas, esquinas revocadas imitando sillares de piedra, cornisa, visera y ático. Está resuelta en 2 planos, correspondientes a las caras internas de la L. El del occidente tiene énfasis en asimetría, con 1 vano horizontal en el nivel de semisótano al norte de las escaleras, 1 de acceso con marco denticular y otro de ventana en piso 1, y 1 de ventana centrado con marco denticular en el piso 2. La fachada al norte, estructurada en 3 ejes, consta de 3 vanos horizontales de ventana en el nivel de semisótano, 3 de ventana con marco denticular en piso 1, los del extremo oriental pareados, y 3 más de ventana con la misma configuración en piso 3. El sistema estructural es de muros de carga en ladrillo con pañete y pintura. La cubierta es a media agua en teja ondulada, con estructura en madera, al igual que la de entrepisos y las escaleras. Al interior los pisos tienen acabado en listones de madera, los cielorrasos en Drywall y carpinterías en madera; las de fachada son metálicas.

Los períodos corresponden a la clasificación propuesta por el Manual de inventario Inmueble expedido por el Ministerio de cultura. Las épocas y siglos identificados en las fichas son aproximados, clasificados de acuerdo con sus caraterísticas del lenguaje arquitectónico, estructura y materiales correspondientes. No obedecen a un estudio exhaustivo de cada inmueble, su precisión será realizada por el estudio histórico que se exija en la presentación de requisitos para su intervención.

Inmueble construido posiblemente en la década de 1930, correspondiente al período de la Transición, en una manzana surgida durante la colonia. Construido como parte del conjunto Calle de las Margaritas, y destinado para vivienda, hoy en día mantiene su uso original. Es propiedad de Myriam Ariza de Prieto, pero no se conocen datos de autor, diseñador o constructor. En aerofotografías históricas no se observan cambios sustanciales en la ocupación del predio, aunque es posible que se haya modificado la cubierta. Tampoco se evidencian intervenciones en fachada o en la distribución espacial. No se conocen datos de solicitudes de intervención ni de antecedentes de archivo.

Valor histórico: Inmueble construido posiblemente durante la década de 1930, correspondiente al período de la Transición. De fácil lectura en su tipología original y lenguaje arquitectónico, debido a que no evidencia modificaciones sustanciales. Representa las características constructivas y repertorio formal desarrollados en Bogotá a comienzos del s. XX, tecnificados ya en la década de 1930; es posible asociarlo a un estilo nacionalista inglés de acuerdo con las tendencias de la época, pero adaptado a las posibilidades técnicas del contexto.

Valor estético: de acuerdo con lo descrito, el inmueble puede leerse integralmente, y es representativo de una tendencia extendida a comienzos del s. XX asociada a una influencia formal de la arquitectura inglesa durante el período de Transición. Es de resaltar el diseño interior con una distribución a partir de una retícula ortogonal de muros, y con acabados rústicos en ladrillo, pañete y madera. También es destacable el diseño de fachada, resuelta en 2 planos, que resalta las esquinas y agrupaciones de vanos con marcos denticulares imitando sillares de piedra; tiene especial protagonismo el acceso con escaleras sobre el nivel de semisótano, el cual a su vez cuenta con acceso desde la fachada, todo ello como parte de un conjunto arquitectónico diseñado a partir de elementos repetitivos.

Valor simbólico: el inmueble hace parte del conjunto urbano que define el Centro Histórico, representa la imagen de la ciudad consolidada durante la primera mitad del s. XX, en el contexto de una densificación del sector influenciada por las tendencias europeas de principios de siglo y la tecnificación de industrias en la zona, con lo cual se promovió su uso residencial. Representa igualmente un estilo arquitectónico que reflejaba las aspiraciones de modernidad de la época.