CL 12 B BIS A 1 38

Inmueble de 4 pisos paramentado en un predio medianero con forma rectangular, cuyas dimensiones son: frente de 7.70 m y fondo de 11.20 m, logrando una proporción de 1 a 1.5 veces aproximadamente, con frente sobre la Calle 12 B BIS A. La ocupación del predio se realiza mediante un volumen compacto con patio lateral posterior hacia el costado occidental. La fachada, en ladrillo a la vista, consta de 4 niveles con zócalo revocado y remate plano con cornisa. Está resuelta en el plano de paramento y estructurada por 4 ejes verticales de vanos. En primer piso cuenta con 2 vanos rectangulares de acceso intercalados con 2 de ventana, mientras que los niveles superiores cuentan con 4 vanos de ventana cada uno; el último nivel, cuenta además con una diferencia de textura lograda con hiladas salientes de ladrillo. El sistema estructural es de muros de carga en ladrillo con acabado de pañete y pintura al interior, y cubierta a un agua en teja de fibrocemento. Las carpintería de fachada son metálicas.

Los períodos corresponden a la clasificación propuesta por el Manual de inventario Inmueble expedido por el Ministerio de cultura. Las épocas y siglos identificados en las fichas son aproximados, clasificados de acuerdo con sus caraterísticas del lenguaje arquitectónico, estructura y materiales correspondientes. No obedecen a un estudio exhaustivo de cada inmueble, su precisión será realizada por el estudio histórico que se exija en la presentación de requisitos para su intervención.

Inmueble procedente del periodo de transición, construido en la primera mitad del siglo XX. Destinado para vivienda multifamiliar, actualmente mantiene este uso y es propiedad de Lisandro Aragón Ruíz. Según las fotografías aéreas de 1936 y 1953, el predio estaba ocupado por un inmueble de volumetría en L y patio lateral. Desde entonces, no ha presentado modificaciones. No se conocen solicitudes de intervención ni antecedentes de archivo.

Valor histórico: En este inmueble, construido durante la primera mitad del siglo XX y perteneciente al período de transición, no se reconocen modificaciones desde su construcción, lo que permite tener una lectura clara de su ocupación inicial, con un volumen en L conformando un patio esquinero. El inmueble es muestra de la arquitectura del período de transición, en que se adaptaban las tipologías tradicionales desarrolladas en el barrio La Concordia en función de las nuevas tendencias estilísticas, pero de acuerdo con las técnicas constructivas de la época.

Valor estético: Se identifican elementos del repertorio formal del periodo de transición, representados por la sencilla composición geométrica de la fachada con disposición regular de vanos y modulación de la carpintería metálica, así como el uso de elementos decorativos como cornisas, marcos y calados de ladrillo a la vista. Se inserta en un perfil urbano heterogéneo en términos de volumetrías y lenguaje arquitectónico, con inmuebles de diferentes períodos (republicano, de transición y moderno).

Valor simbólico: El inmueble hace parte del conjunto urbano que define el Centro Histórico y es muestra de la arquitectura de transición al período moderno; se inserta en una manzana tradicional, con un diseño modesto de acuerdo con las posibilidades técnicas del contexto. El sector está influenciado por espacios culturales como la Plaza de Mercado de La Concordia o la Plaza del Chorro de Quevedo, llamado así por la fuente pública instalada por el agustino F. Quevedo en 1832, en un lugar de origen prehispánico y en el que, según la tradición, Jiménez de Quesada estableció su guarnición militar antes de fundar la ciudad (Mauricio Uribe, comunicación publicada. 2017).