KR 1 12 D 1

Inmueble de 4 pisos paramentado en un predio esquinero con forma irregular, cuyas dimensiones son: 22 m de frente por 16.9 m de fondo, dando una proporción de 1 a 1.3 veces aproximadamente, con frentes sobre la Carrera 1 y la Calle 12 D. La ocupación del predio se realiza a partir de un volumen en L con patio lateral cubierto en el ala norte. Se accede a través de una circulación central con escaleras laterales en el vértice del volumen; en el ala sur cuenta con 1 habitación, bodega y 2 locales, todos con acceso independiente desde la calle; en el ala norte cuenta con 5 habitaciones y cocina. La fachada es continua por ambos frentes y consta de un cuerpo con vanos verticales, zócalo revocado y remate en ático con cornisa; consta de 3 niveles en el ala sur, y de 4 en el ala norte, unificados por un mismo pañete y pintura, pero diferenciados por la altura de los entrepisos y por la forma de los vanos: en la parte antigua, con menor altura, se encuentran enmarcados en bajorrelieve y repisa, mientras que en el segundo volumen corresponden a vanos cuadrados agrupados por una moldura horizontal en su base. El frente oriental está estructurado por 6 calles diferenciadas por pilastras, 1 calle adicional corresponde a la esquina y 1 más, al costado sur. El sistema estructural es de muros de carga en mampostería con revestimiento de pañete y pintura, entrepisos de madera y cubierta es a 2 aguas con teja de barro y fibrocemento. Las carpinterías son en madera y metal, y los pisos tienen acabado en baldosín cerámico.

Los períodos corresponden a la clasificación propuesta por el Manual de inventario Inmueble expedido por el Ministerio de cultura. Las épocas y siglos identificados en las fichas son aproximados, clasificados de acuerdo con sus caraterísticas del lenguaje arquitectónico, estructura y materiales correspondientes. No obedecen a un estudio exhaustivo de cada inmueble, su precisión será realizada por el estudio histórico que se exija en la presentación de requisitos para su intervención.

Inmueble construido durante el período republicano, a comienzos de siglo XX; dado su lenguaje de fachada, es posible filiarlo al período de transición. Desde su origen ha tenido un uso residencial, el cual aún conserva; es propiedad de Héctor Julio Toledo Lozano, pero se desconoce su diseñador y su constructor. En aerofotografías históricas se observa que el inmueble, aunque conserva su tipología, tuvo variaciones en la configuración de cubiertas a lo largo del siglo XX. No se conocen datos de solicitudes de intervención ni de antecedentes de archivo.

Valor histórico: En este inmueble, construido durante la primera mitad del siglo XX, aún es posible tener una lectura de la tipología original a pesar de sus modificaciones en cubierta. Conserva su distribución interior con espacios organizados en una crujía con acceso desde la calle, y otros en torno a un patio que actualmente estña cubierto. Mantiene asimismo, su diseño de fachada, muestra de la arquitectura del período republicano con posibles modificaciones del período de transición, como lo demuestran las pilastras que la modulan.

Valor estético: De acuerdo con lo descrito, el inmueble puede leerse de forma integral a pesar de sus modificaciones. Es representativa del periodo republicano con modificaciones del período de transición. Su valor estético radica en la manera en que se disponen los elementos decorativos de los vanos de las fachadas, los cuales poseen molduras especiales para algunas ventanas y las pilastras que trazan ejes verticales estructurando la composición. El inmueble se inserta armónicamente en un perfil urbano heterogéneo en términos de altura, volumetría y lenguaje arquitectónico.

Valor simbólico: El inmueble hace parte del conjunto urbano que define el Centro Histórico y es muestra de la arquitectura de ese período, con un diseño logrado de acuerdo con las posibilidades técnicas del contexto. Se localiza en el límite de la ciudad con los cerros y agrupa predios de antiguo uso industrial y dotacional. Debe su nombre a la Iglesia de Las Aguas, cuyo origen se remonta al s. XV, sobre la ronda del río San Francisco y en cercanías a la Quinta de Bolívar. En él predomina actualmente el uso dotacional universitario y residencial.